¿Cuánto tiempo dura realmente un empaste dental?

Si recientemente te hicieron un empaste dental, probablemente te preguntes cuánto tiempo durará antes de necesitar un reemplazo. La buena noticia es que, con los cuidados adecuados, un empaste dental puede durar muchos años.

¿Qué factores determinan la duración de un empaste?

Existen varios elementos que influyen directamente en la longevidad de un empaste. Entre los más importantes se encuentran:

• Material utilizado: Los empastes de amalgama (metálicos) suelen durar más tiempo, aproximadamente entre 10 a 15 años, mientras que los empastes de composite (del color del diente) tienen una vida media de 5 a 10 años.

• Ubicación del empaste: Los empastes en dientes posteriores (muelas) tienden a desgastarse antes debido a la mayor presión durante la masticación. En cambio, los empastes en dientes frontales suelen durar más si no están sometidos a grandes cargas de fuerza.

• Hábitos del paciente: Personas con bruxismo (rechinar o apretar los dientes) o con malos hábitos, como morder bolígrafos, abrir envases con los dientes o consumir constantemente alimentos muy duros o pegajosos, pueden acortar considerablemente la vida útil del empaste.

Tipos de empastes y su durabilidad aproximada

A continuación, una guía orientativa para entender cuánto puede durar cada tipo de empaste dental y sus características:

Consejos prácticos para prolongar la vida útil de tus empastes

• Mantén una excelente higiene oral para evitar nuevas caries alrededor del empaste.
• Usa pasta dental con flúor para fortalecer el esmalte.
• Evita alimentos demasiado duros o pegajosos que puedan dañar o desprender el empaste.
• Considera usar una férula de descarga si sufres bruxismo.
• No utilices tus dientes como herramienta, evita romper cáscaras o abrir objetos con ellos.

¿Cómo saber si un empaste necesita ser revisado?

Algunas señales que pueden indicar que el empaste está deteriorado o dañado son:

• Sensibilidad al frío, calor o dulces.

• Dolor o molestias al masticar.

• Grietas visibles, cambios de color o bordes irregulares.

• Sensación de cuerpo extraño o aspereza al pasar la lengua.

Si notas que un empaste está agrietado, desgastado o provoca sensibilidad, visita a tu dentista cuanto antes. Un tratamiento oportuno evita problemas mayores y protege la salud general de tu boca.

Recuerda

El cuidado constante, una técnica de cepillado adecuada y las visitas periódicas al dentista asegurarán que tus empastes duren mucho más tiempo, evitando molestias y tratamientos innecesarios.

Artículo revisado por el Dr. Cerro Alonso